¿Ha sido difícil llegar? Mi experiencia es más subjetiva que la de mis compañeros dada mi religión, yo viaje estando en ramadán. El 13 de marzo salí de Madrid rumbo a Roma, el avión lo tenía a media mañana y llegaría a Roma sobre las siete de la tarde, mi plan era pasar la noche en el aeropuerto de Roma y continuar el viaje por la mañana, cuando llegue a Roma vi que la estación de buses estaba dentro del aeropuerto y vi que las horas en las que salía el bus dirección Abruzzo-Vasto eran las siguientes: el bus de las 10 de la noche llegando sobre las dos y media de la madrugada a Vasto y el siguiente bus que salía a los 12 de la mañana llegando a Vasto sobre las seis de la tarde. Tomé la decisión de coger el bus de las diez de la noche dado que al estar en ramadán no podía físicamente hacer el viaje en el segundo bus. Saque el billete del bus y espere desde las siete de la tarde hasta las diez de la noche, al llegar al bus me comunique con mi arrendador, dado que el alojamiento me lo busque por cuenta propia, y le explique la situación y me dijo que el me recogería en la estación de buses a las siete de la mañana. El bus llego a las dos de la mañana a Vasto, la estación de bus era al aire libre y las temperaturas de la madrugada eran muy frías, estuve esperando en la estación desde las dos de la mañana hasta las siete, Giovanni mi arrendador, me llevo al apartamento. La primera semana, dado que estuve a la intemperie de madrugada me puse enferma y estuve una semana enferma. Más tarde supe que la salud en aquí se paga, la consulta son unos 30 euros, pero debes de ir a Vasto y yo había alquilado en Marina di Vasto a unos veinte minutos de Vasto.
¿Cómo ha sido la recepción por parte de la intermediaria y por la empresa?
Llegue a Vasto en la madrugada del 14 de marzo, y según tenía entendido la intermediaria iba a reunirnos con nosotros al cabo de dos días, pero no fue hasta el día de antes de empezar las prácticas que nos reunimos con él. Nos enseñó la ciudad y cómo funcionaba la red de transporte público, así como los principales supermercados.
¿Cómo ha sido el alojamiento y las prácticas?
El alojamiento ha sido una odisea, en mi opinión ha sido lo más complicado de coger dada la barrera del idioma, ciertamente estaba la opción de que la intermediaria te encontrar un alojamiento compartido con los compañeros con los que ibas, dado que yo era la única chica del grupo tome la decisión de encontrar alojamiento por mi cuenta, si es verdad que al encontrarlo por cuenta propia el gasto es muchísimo más inferior que si lo hubiera encontrado la intermediaria. He tenido mucha suerte con mi casero porque me trata muy bien, me recogió de la estación al llegar a Vasto, al llegar encontré que en la casa me había dejado una compra inicial que realizo él, y cada semana me pregunta si necesito algo, en pascua aunque yo no la celebro vino y me trajo unos dulces tradicionales de esta festividad. La verdad que el dolor de cabeza que fue el encontrar alojamiento por mi cuenta al final ha sido la mejor decisión que he tomado en este viaje.
En cuanto a las prácticas sinceramente venía con la mente abierta y dispuesta a aprender todo lo que estuviera dentro de la programación, ciertamente tenía la inclinación de hacer algo relacionado con recursos humanos o contabilidad, pero no me cerraba a otro campo de nuestra disciplina. Me asignaron a la oficina de turismo donde pensé sinceramente que no habría mucho trabajo comparado con los otros departamentos (recursos humanos, tesorería…) los primeros días me asignaron pequeñas tareas administrativas. Tras una semana mi tutor me comento que tenía un proyecto internacional con la región de Dakhla, Marruecos. Me asigno parte de este proyecto y aunque ha sido bastante complicado dada la barrera del idioma, he aprendido un montón desde presupuestar medio millón de euros hasta los anexos y la burocracia detrás de todos los proyectos de carácter internacional. Si es verdad que el año que viene me propongo estudiar relaciones internacionales y ver que mis prácticas entran dentro de lo que aspiro a estudiar me reconforta y me inunda de felicidad, aunque sea complicado y la responsabilidad es grande, las prácticas no eran lo que esperaba, pero han sido una agradable sorpresa.
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